No fue una mañana rutinaria en la escuela Normal Rafael Obligado, una amenaza de bomba había obligado a desalojar el colegio, unos 90 alumnos que cursaban en ese instante, y que se tomen las medidas preventivas correspondientes.
La sensación, como viene sucediendo en reiteradas ocasiones tanto en la ciudad como en el resto de la provincia, es que se trataba todo de una falsa alarma, pero no por eso se debía subestimar y era apropiado tomar todos los recaudos posibles. Luego de un minucioso e intenso trabajo de personal de explosivos de San Nicolás, finalmente se confirmó que todo se había tratado de una broma de mal gusto.
Lo extraño es que generalmente esto sucede cuando se toman exámenes pero no era este el caso, así que después de una larga espera los alumnos regresaron y las clases continuaron con normalidad.
A partir de la denuncia, la fiscal que entiende en la causa, la Dra. Franca Padulo, junto a personal de la DDI se abocaron a tratar de identificar el teléfono desde donde se hizo la llamada para así dar con el culpable. En este caso se trataría de una mujer. Según lo que se pudo conocer, el número ya habría sido identificado.
Desde la procuración de la provincia vienen trabajando intensamente para terminar con este tipo de episodios.
Lo extraño es que generalmente esto sucede cuando se toman exámenes pero no era este el caso, así que después de una larga espera los alumnos regresaron y las clases continuaron con normalidad.
A partir de la denuncia, la fiscal que entiende en la causa, la Dra. Franca Padulo, junto a personal de la DDI se abocaron a tratar de identificar el teléfono desde donde se hizo la llamada para así dar con el culpable. En este caso se trataría de una mujer. Según lo que se pudo conocer, el número ya habría sido identificado.
Desde la procuración de la provincia vienen trabajando intensamente para terminar con este tipo de episodios.